Apple abandona la certificación ecologica

Sofía Plaza

La compañía abandona EPEAT la certificación ecológica de sus productos, que exige que sean fáciles de desmontar y actualizar aunque participar es voluntario. Esto facilita al usuario actualizar por su cuenta el disco duro, la batería o la memoria RAM, además de permitir reparaciones sin necesidad de acudir al servicio técnico oficial.

El famoso «ecosistema cerrado» de Apple se limitó, durante años, al software a excepción del iMac, el resto de sus ordenadores se ‘abrían’ con facilidad como por ejemplo los Mac Mini, los portátiles Macbook y su sobremesa Powermac.

El último paso de Apple hacia el cierre completo de sus sistemas vino con la presentación de los nuevos portátiles Macbook con pantalla «retina». Tanto la batería como la memoria RAM de este modelo van fijadas a la placa y por tanto no son ni reemplazables ni actualizables.

Una consecuencia de la salida de EPEAT es que Apple dejará de poder vender sus productos a las administraciones federales estadounidenses porque aunque estar registrado sea voluntario, este tipo de administraciones lo exigen.

Greenpeace  criticó la política ambiental de Apple hace unos años consiguiendo algunas mejoras en el empaquetado de sus productos y eliminando elementos tóxicos de sus procesos de fabricación.